Un verdadero dolor de cabeza es el que se genera cada 6 años por el famoso aumento del pasaje. El gobierno saliente ya no quiere más problemas y el entrante no quiere cargar con el costo político que esto genera en la población y, lo que es peor, recién entrada la nueva administración.
El caso más reciente que tengamos memoria fue el pleito entre Tony Gali y Rafael Moreno Valle por el susodicho aumento que terminó con una amistad. Más bien una relación porque amigos, amigos nunca fueron.
Los 2 desconfiaban uno del otro. Uno le tenía miedo y el otro sabía que un día lo traicionaría como Pedro a Jesús. Como viejos lobos de mar, los 2 tuvieron razón.
El punto aquí es que ninguno quería asumir el costo político de tal aumento. Y como la historia es cíclica, en estos momentos nos encontramos en la misma situación, a pesar que el cambio de estafeta ha sido terso siempre hay imprevistos.
Lo grave del asunto es que el día de ayer nos enteramos que los dueños de esas concesiones , y por ende, los causantes de la presión hacia el gobierno del estado, son exfuncionarios públicos concretamente, ex secretarios del ramo, que en un claro conflicto de intereses se auto asignaron concesiones.
Pero el asunto no para ahí. Además de darles concesiones a familiares y parientes, entregaron concesiones a varios periodistas que están sirviendo de punta de lanza para arremeter en los ataques debido a que ya son juez y parte.
El Gobernador Armenta ya tomó el toro por los cuernos y les advirtió que él no se prestará a chantajes, y con mayor razón de concesionarios que obtuvieron sus licencias de manera irregular y al margen de la ley.
Ahora, sí estos concesionarios hubieran reinvertido sus utilidades y tuvieran sus unidades rechinando de limpias, nuevas y contar con personal capacitado y uniformado, la gente con gusto pagaría por el servicio. Pero ¿que tenemos? unidades viejas, personal totalmente incompetente y una inseguridad que da miedo. No hay que olvidar que la principal causa de robo a mano armada se da precisamente en el transporte urbano de la ciudad de Puebla y alrededores.
Y ya que hablamos de los concesionarios, sería también importante que el nuevo gobierno, investigara con lupa quienes tienen las concesiones de Ruta y en qué términos se otorgaron y aplicar la ley y cancelar todas las que hayan sido otorgadas de manera ilegal o al margen de la ley.
Mi amiga Silvia Tanus se sacó la rifa del tigre, es una mujer preparada con mucha trayectoria y sobre todo tiene la confianza del gobernador. Se tiene que ir a fondo en este tema para que, dentro de 6 años, este problema ya no sea repetitivo.
Igualmente con las mafias de taxistas irregulares que solo se dedican a vender droga o a asaltar, y que ya se volvió un problema de seguridad.
La gente más pobre destina del 17 al 22% de sueldo solo a transporte público, lo que convierte a este problema en uno social, de gran repercusión en las clases más necesitadas.
Chayote
El Gobernador Electo, Alejandro Armenta, que se fajó los pantalones y le advirtió a los concesionarios del pulpo camionero que no se va a prestar a sus chantajes.
Espina
Los concesionarios del transporte público que amenazan con parar la ciudad sino se cumplen sus amenazas; pero también la mano que mece la cuna, que quiere desestabilizar al gobierno entrante para sacar más canonjías y concesiones. Ahora si, como diría el inolvidable Don Enrique Montero Ponce, “No se vale”.
Es cuánto. Y recuerden Abrazos y no balazos
